Juro que creía que iba a ser un viaje catártico. Que volvería convertido en otro ser, con las ideas mucho más claras, con un planteamiento de la vida distinto. Que el reencuentro con la ciudad que me vió madurar, y la gente con la que pasé algunos de los mejores momentos de mi vida, me haría enforcar mi presente y mi futuro de otra manera.
Sight!!! Y en realidad me encuentro con que nos estamos haciendo viejos, que sigo difrutando con ellos porque son mis amigos, pero que el tiempo nos hace mella, y ya no somos los chavales locos de antes. Por otro lado, veo que es una pena que en mi ciudad no tenga gente con la que hablar de ciertos temas, con las que compartir ideas y conceptos, con las que aprender. Que tenga que aguantar interminables conversaciones sobre futbol cada día, y no pueda discutir sobre la importancia de la subordinación de la mujer en la mayoría de las relaciones, y como toda esa visión de la liberación femenina en el mundo occidental (del resto del mundo no hablo, porque eso casi ni es mundo) es falsa. Que hoy en día aquello tan noble y bonito de la búsqueda de la verdad ha quedado totalmente desfasado... Bueno y todas esas cosas de las que me gustaría hablar más a menudo.
En mi empresa, todo va avanzando según el plan que escribí hace 2 meses, sorprendentemente sigue un plan diseñado por mi. Sólo hay que brillar sin deslumbrar en los momentos adecuados, y el resto del tiempo aguantar con una sonrisa y mucha humildad.
Nada, mañana más... Pero supongo que más tranquilo. Porque el tiempo que he pasado en la mansión de mi amigo ha sido de lo más placentero, y he dormido por fin como un lirón.
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