miércoles, 26 de marzo de 2008

Día 5

Llevamos a su conejo al veterinario... Todo genial de cara al público, la parejita féliz lleva a la mascota a que la cuiden.

Llegamos a su casa, me prepara un café y me suelta que el casado la ha mandado un mail diciendo que si la escribiese una carta la leería, ella lleva sin contestar al casado más de 7 meses y el tío sigue y sigue... La pregunto si me deja mandarle algún mensaje al casado, algún correo electrónico o alguna carta, al principio me dice que como lo voy a hacer si no sé su dirección, por supuesto la pregunto que si en el caso de que la descubriera le molestaría que se lo enviase... A estas alturas de partido debería conocer ya mi facilidad para obtener información de la red... Dice que ni se me ocurra, que no me afecta... La digo que le afecta a ella e indirectamente a mi, que no es normal estar de vacaciones y que el tipo llame y mande mensajitos. Finalmente la digo que si vuelve con el casado le parto la cara por gilipollas y pesado (al casado se entiende). Ella dice que no tiene pensado hacerlo, pero que tendría que respetar su decisión, y yo la digo que entonces me daría totalmente igual la opinión que pudiera tener ella de mi... Pero que le partiría la cara al puto casado de los cojones.

Creo que ella no se toma demasiado en serio el comentario... Yo creo que sí lo haría si volviera con él.

Por gilipollas y pesado.

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