Valencia, la zona cero del chanchullo, el reino de Fabra & co., la comunidad autónoma más quebrada. Valencia nos está enseñando la solución del PP a las protestas, palos y más palos.
Cuando se aplica la violencia sólo hay dos vías, la sumisión o la respuesta violenta. Bueno, hay alguna más, como la sumisión violenta del desarraigado o los que explotan pasado el tiempo como una olla a presión.
Veremos como acaba todo esto, pero el Partido Popular parece que tiene claro que lo que busca es la represión violenta de la sociedad.
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