Lo odio, de verdad, odio el verano... La época donde todo el mundo se siente liberado para mi es un verdadero horror, un conjunto de días en los que puedo apreciar detenidamente mi soledad, mientras mi portatil se apaga debido a la mala refrigeración escucho a mi vecinos de arriba gritar como enajenados, veo a los antiguos niños del barrio convertidos en unos macarras treinteañeros pasando las horas sentados en unas escaleras y bebiendo litronas. Me horroriza el verano, no sé que hacer con el tiempo que me sobra, y tampoco sé si me sobra el tiempo. La gente se va sus diítas a la playa y allí beben cervezas, bajan a la playa, leen las novelas de moda, se emborrachan por las noches... No sé, de verdad, no sé ¿Estoy demasiado existencialista o eso sigue siendo una puta mierda?, odio el verano.
Y me han dejado.
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